lunes, 10 de septiembre de 2012

Dos bodas, y el paso del tiempo

Llega septiembre, comienza un nuevo curso y llegan las dos tan esperadas bodas de este año. Dos amigos mios, uno de Madrid y otro de Santoyo, se van a casar con sus respectivas parejas en los próximos quince días. Cuando un amigo te dice que se casa siempre te vienen los recuerdos, sobre todo cuando se trata de dos amigos añejos, de esos de tu mas tierna infancia.

Con el amigo de Madrid fui al colegio. Es primo de un compañero de clase. A ambos les conozco desde muy pequeño. De este amigo tengo muchos y muy buenos recuerdos. Por ejemplo cuando en el colegio, una vez habían terminado las clases, nos íbamos a un bar llamado "El Koala" (que ya no existe) y comprabamos cañas de chocolate. Echabao nos subimos a la sala de informática a echar "unos vicios" al Ironman, Worms y otros juegos. La primera vez que monté en metro solo fue para ir a su casa pues viviamos en la misma linea del suburbano. También a veces íbamos juntos al fútbol, unas veces al Calderón (él es del Atleti) y otras al Bernabeu. Volviendo al colegio, recuerdo también cuando jugábamos al fútbol, en el equipo del cole, aunque este amigo era un año mayor. Pero no solo de fútbol vivíamos sino que también íbamos a ver la Vuelta a España donde se terciase: Villalba, El Escorial o en nuestra propia Madrid. Estos son unos cuantos recuerdos de tantos como en mi memoria tengo.

Con mi amigo de Santoyo jugaba todos los veranos en el pueblo, eramos de la misma cuadrilla, al fútbol en El Plantío, al Rescate en la plaza. Muchas veces íbamos a merendar a la bodega o en bicicleta a recorrer los pueblos de alrededor, a bañarnos en la acequia o en el río. Siempre digo que para mi los amigos del pueblo, aunque les veo poco son realmente importantes en mi vida. Recuerdo que también a veces íbamos al cine a Palencia y fue con ellos con quienes comencé a salir de fiesta.

Como digo, el hecho de que se casen dos amigos de la infancia es algo que siempre te hace reflexionar sobre el paso del tiempo. A veces da vértigo cuando se vuelve la vista atrás recordando momentos del pasado. Hace cosa de un año estuve en Guadarrama, otro pueblo donde veraneaba de pequeño. Lo recorrí y me daba cuenta de que, aunque la mayoría seguía igual, habían cambiado cosas, edificios que ya no existían (incluyendo cierto garaje que nunca terminó de construirse), otros nuevos que nunca habías visto. Lo mismo me sucede cuando vuelvo por Carabanchel, el barrio de mi infancia o cuando paso por el colegio y veo que el patio de parvulitos ya no existe y que ha cambiado demasiado (no lo digo solo yo). Te das cuenta de lo rápido que pasa el tiempo y de cuanto has disfrutado con lo que viviste. Por que yo soy de los que piensan que no hay que mirar el pasado con la tristeza de "aquellos momentos no volverán" sino con la alegría de haber vivido momentos tan felices y de haberlos compartido con personas que significan tanto para ti: familiares, amigos, etc.

Por ello creo que en la vida son importantes varias cosas. La primera cuidar a las personas que tienes a tu alrededor, sobre todo aquellas que llevan toda la vida contigo. El curso pasado me porté un poco mal con un amigo y, cuando se enfadó, me dijo "tío no tienes que tratar mal a tus colegas, si tuvieras motivos para desconfiar de ellos alguno no llevaríamos venticinco años siendo tus amigos". Es algo que me impactó pues siempre he tenido miedo a quedarme sin amigos, supongo que influye el hecho de que soy una persona bastante tímida. Además, ha habido personas que he conocido en una época mas reciente de mi vida (los últimos siete años) que después se han alejado de mi por errores que cometí. Por ello soy consciente de que a los amigos de toda la vida, los que son amigos de verdad, hay que cuidarles. Hoy me he llevado una gran alegría puesto que he encontrado a un viejo amigo de la infancia, llevo sin saber nada de el casi veinte años, se cambió de colegio, y desde entonces había tratado de saber algo de él. Por ello doy gracias a Dios de haberle podido encontrar. En los últimos años he podido recuperar a varios amigos del colegio de los que no sabíamos nada desde que se fueron, y espero que podamos seguir encontrando a mas gente, de hecho estamos creando un grupillo y de vez en cuando quedamos. Esas cosas son buenas para mantener la amistad.

En definitiva, el tiempo pasa, pero son muchas las personas que permanecen en tu vida a pesar de todo. Una vez escuché que "los amigos de tu infancia son los que te acompañarán en la vejez". Creo que esa frase encierra una gran verdad. Como dije antes, apenas hace dos días que con estos dos amigos jugaba de pequeño y ahora resulta que van a contraer matrimonio con las que, espero, serán las mujeres de sus vidas. Espero que ambos sean muy felices y espero poder seguir acompañandoles mientras viva. Ellos saben que siempre me tendrán a su lado, especialmente cuando mas puedan necesitarme.