miércoles, 28 de marzo de 2012

La luz en la comunicación

Verdad y belleza no son dos términos de moda hoy en día, como ocurre en general con los valores humanos. De hecho en la actualidad se relativiza la verdad con el sofisma: "no hay verdad absoluta", a lo que yo contesto: si no la hay tampoco puede ser cierta la frase que niega la existencia de verdad.
En un comunicador, alguien que relata un hecho, debe prevalecer la verdad. Esta no es sino el ajustar el entendimiento a la realidad. De hecho el objetivo de alguien que pretender comunicar debe ser alumbrar el hecho en la mente del receptor cual partera socrática (La forma de Sócrates de enseñar era alumbrar un conocimiento en la mente de aquellos con los que hablaba mediante la interpelación).

Hay una frase que me encanta: "poner luz y taquígrafos". Muchas veces vemos como las noticias que nos llegan (sea de periodistas, historiadores, etc) lo hacen de una forma que en vez de mostrar luz lo que hacen es sumergirnos en la oscuridad de la cueva platónica al no contarnos toda la verdad.

Los que tenemos esa labor de comunicar ¿Qué debemos hacer? en mi opinión una vez hemos visto la realidad fuera de esa cueva debemos comunicarla del modo en que ha sucedido. En el caso de aquellos que somos cristianos debemos darle un trasfondo que recalque nuestra personalidad, pues no debemos olvidar que la fe engloba toda la dimensión humana. De hecho creo que María es el mejor testimonio para nuestra labor pues ella supo ver, en la desolación de la crucifixión de Jesús, la luminosidad de la verdad y el amor divinos. Ella sufrió, pero era consciente del inmenso amor de Dios para la humanidad sabiendo ver el significado de lo que sucedía mejor que nadie.

Creo que un comunicador debe observar el mundo con los ojos de María para poder ofrecer luminosidad, especialmente cuando la noticia a contar está cargada de desazón. Un ejemplo quizá sea el del 11M. Aquel día hubo periodistas capaces de saber ver, en el trasfondo de aquel hecho cruel, que por encima del odio que había llevado a unos seres a cometer un atroz acto de locura criminal estaba la bondad presente en los miles de madrileños que, con su generosa donación, cubrieron las necesidades relativas a la transfusión de sangre. O también la generosidad de los taxistas que llevaban gratuitamente a los heridos, y a sus familiares, a los hospitales cuando vieron que las ambulancias estaban desbordadas. Creo, además, que es justo igualmente hacer mención a la impagable labor de sacerdotes y psicólogos que acudieron a IFEMA para dar consuelo y apoyo a las familias de los difuntos.

Creo que la luz y la verdad están unidas por un vinculo invisible que debe llevar al comunicador a llevar no solo la realidad de los hechos sino también aquellas cosas que de positivas pueda haber en la realidad, por negativa que sea. Pienso que frente al sensacionalismo promovidos por algunos sobre cuestiones presentes o pasadas nosotros tenemos una labor necesaria de confrontar la realidad para poder arrojar luz sobre ella e, igualmente, saber sacar los detalles positivos.

Durante un tiempo, como recordareis, estuvo de moda en los medios de comunicación el tema de los casos de pederastia que se habían dado en el seno de la Iglesia en el pasado. Es cierto que es un tema malo, de hecho no hay peor pecado que hacer daño a un niño, en mi opinión es algo imperdonable (hay de aquel que haga daño a uno de estos mis pequeñuelos....) pero uno se da cuenta de que aquella buena labor desempeñada por tantos buenos sacerdotes que desgastan su vida en favor de los hombres buscando su bien y santidad en muchas ocasiones no es mencionada. Murieron buenos sacerdotes con una labor de gran dedicación en su parroquia o en las misiones y sus vidas pasaron de largo en los grandes medios, poca gente supo de ellos. Creo que es labor nuestra la de confrontar las malas noticias sobre los sacerdotes con aquellas noticias que pasan desapercibidas porque al ser buenas no interesan (vivimos en un tiempo donde lo destacable es el morbo, por desgracia).

Otro ejemplo, que a mi como historiador me toca de cerca, es lo sucedido con las acusaciones que se vierten acerca de una supuesta benevolencia eclesial hacia el nazismo. Pero quienes afirman que la Iglesia tuvo esa benevolencia hacia el nazismo ignoran a San Maximiliano Kolbe (que murió para salvar a otro hombre, en Auswtich), los jóvenes de la Cruz Blanca, Schlinder (que era católico) y tantos obispos y sacerdotes que se enfrentaron directamente con el nazismo e incluso acogieron en sus iglesias a judíos para que pudieran esconderse. Pero es que el propio Pio XII es considerado por los judíos como "Justo entre las Naciones" por su papel en la II Guerra Mundial donde salvó a muchos judíos de la muerte protegiéndoles en Roma.

Dice el adagio que "en la noche todos los gatos son pardos". Con respecto al tema que hoy nos ocupa pienso que cuando informamos de algo sin la debida luminosidad estamos mostrando la realidad con único matiz, el nuestro propio, dando lugar a aquello que decía Heráclito "se han fabricado un logos propio, ignorando al Logos universal". La realidad es una y la verdad no puede ser vista con el prisma que egoistamente hayamos escogido sino que debe ser mostrada en todos sus aspectos, con todos sus matices y colores. Para ello necesitamos la luz natural de la razón, que por cierto no solo es perfectamente

Un ejemplo de todo esto que estoy diciendo es que si un periodista publica la siguiente noticia: "un peatón ha pisado a un gato, y además lo ha hecho adrede" siendo consciente de que ese peatón era ciego está cometiendo un ocultamiento de la realidad con el objetivo de perjudicar a un peatón. Claro, si es ciego le ha pisado sin querer, pero sino lo era lo ha hecho porque le molestaba el gato, no le gustaban los gatos o simplemente se lo ha querido quitar de en medio.

Volviendo a María creo que ella es la mejor maestra. Supo alumbrar todos los acontecimientos de su vida tras el "Fiat" (hagase, en latín, no es la marca de coches) que dio al Señor confiando en que lo que Dios le había prometido se cumpliría. Creo que los comunicadores (periodistas, historiadores, filósofos, profesores, etc) debemos caminar, seamos creyentes o no, como observadores de la realidad dándole luz para poder fijarnos en todos los detalles y alumbrando los hechos a comunicar en nuestros receptores con el objetivo de que estos puedan conocer la verdad.

martes, 27 de marzo de 2012

La legion romana de China

Hay una tradición China según la cual un grupo de personas asentados en Zhelaizhai son descendientes de soldados romanos que llegaron hasta aquellas tierras hace dos mil años.

Tenemos que remontarnos al triunvirato formado por Julio César, Lépido y Craso. Este último avanzó por Turquía con siete legiones, un imponente grupo de arqueros y unos pocos miles de jinetes galos. En total unos cuarenta y dos mil soldados. Aunque su objetivo era derrotar a los partos sucedió lo contrario pues cuando atravesaban el Eúfrates fueron fueron derrotados y atrapados por la caballería enemiga. Sucedió en Carhae en el 13 a.C (actualmente Harrán, Turquía) siendo tomados como prisioneros los supervivientes (entre 7000 y 10000).  

Se habían perdido ocho cohortes, aniquiladas. Unos 10.000 hombres fueron capaces de refugiarse en las ciudades vecinas, donde los partos, al no conocer el asedio, apenas eran eficaces. Otros 20.000 hombres terminaron en el desierto, algunas teorías apuntan a que fueron ellos quienes llegaron a China, aunque no hay documentación al respecto.

Según la teoría de Warwick Ball a los 10.000 soldados tomados como prisioneros de guerra se les unió posteriormente (36.a.C.) un contingente romano capturado en Armenia. En Uzbekistán, además, existen inscripciones en latín que mencionan a la "Legio XV Panonia". Otra teoría afirma que algunos romanos pudieron combatir como mercenarios al servicio de los hunos blancos.

Según sabemos por Plinio y Plutarco, los prisioneros romanos fueron conducidos por el Imperio parto llegando hasta el actual Afganistán. La mayoría habían sido esclavizados pero algunas unidades fueron utilizadas por los partos para seguir combatiendo, obteniendo con ello cierta garantía de no ser condenados a la esclavitud. Una parte de estos hombres fueron enviados hasta el río Orxus (en el actual Turkmenistán), donde según Plinio se casarían con las lugareñas.

En el 20 a.C se firmó la paz entre los partos y los romanos estableciéndose la vuelta de los prisioneros supervivientes, los cuales se desconocía donde estaban ubicados. Se había perdido su rastro.

En una conferencia impartida en Londres el historiador Homer Hasenpflug Dubs aseguró que conocía el destino de aquellos legionarios. La conferencia se llamó "Una ciudad romana en la antigua China". Su teoría era que encajaban los relatos romanos con las crónicas sobre la dinastía Han China que llevó a cabo una campaña militar en el 36 d.C. contra los Xiongnu (supuestos predecesores de los hunos) en la provincia de Xinjiang. El general chino Gan Yanshou se encontraba al frente de esta campaña relatada por Ban Gu. Según los indicios es posible que la zona del Pamir hiciera de frontera entre el general y la legión perdida.

Por otra parte, si tenemos en cuenta las crónicas chinas, existen razones para pensar que entre los defensores de Zhizhi, ciudad de Uzbekistán (actuál Dzhambul) había miembros de aquella legión perdida. En una de las batallas los chinos lucharon contra un contingente constituido por soldados veteranos, de gran disciplina. Estos soldados protegían su asentamiento con una fortaleza de madera de forma cuadrangular. Luchaban "alineados y desplegados en una formación parecida a las escamas de pescado", detalle este que nos recuerda a la famosa testudo romana para protegerse con eficacia frente a las flechas. Según Ban Gu causaron admiración entre los chinos, quienes perdonarían la vida a los 1000 o 2000 soldados supervivientes siendo destinados a Gan Su, donde fundarían la ciudad de Liquian.

Esta teoría la defiende Valerio Manfredi, para quien habrían llegado a China de la mano de sus captores e incluso es posible que llegasen a fundar una ciudad. No se trata de algo descabellado si tenemos en cuenta que las legiones romanas eran famosas por su capacidad constructiva. No es tampoco descabellado que pudieran realizar una larga caminata pues en su dinámica militar eran parte importante las marchas militares. Es cierto que lo que dicho autor escribe es una novela, pero aun así la teoría es sugerente y, como veremos, existen ciertos datos que apuntan a que puede tener bastantes visos de realidad. Continuemos con la historia.

Aquellos hombres fueron asentados en pleno desierto del Gobi con el objetivo de proteger las zonas fronterizas del Imperio chino de las incursiones tibetanas. El lugar donde vivieron corresponde a la actual Zhelaizhai, en la provincia de Gansu y cuyo nombre en el 5 d.C. era Li-Jien (Liquian), una variante china de Legión usada por los chinos para referirse a Roma pues, gracias a los comerciantes chinos que llegaban hasta Alejandría, conocían el poder y la opulencia de los romanos. De hecho fueron habituales las embajadas entre Roma y China durante el reinado de Marco Aurelio. Al predecesor de este, Antonino Pio, los chinos lo conocían como An Tun. En torno al 170-180 d.C. había tenido contacto este emperador con una delegación que proponía regularizar una ruta comercial, acontecimiento que, como digo, apareció reflejado en las fuentes chinas.

Unos años mas tarde el lugar fue renombrado tomando Jie-Lu (cautivos) como nuevo nombre. Estaba en plena ruta de la seda, quizá fuera este uno de los motivos que llevó a los chinos a establecer dicho lugar para el asentamiento de unos soldados con tanta experiencia.

Existe una teoría según la cual los descendientes de estos hombres fueron derrotados en el siglo VIII. Sin embargo es probable que no fueran arrasados del todo. Existen datos según los cuales hay diferencias físicas importantes entre los nativos de esta zona con respecto al resto de los chinos. La Universidad de Lanzhou efectuó unos análisis de ADN cuyo resultado fue que el 46% de los habitantes de Zhelaizhai tenían afinidad genética con poblaciones europeas. Por otra parte, debemos tener en cuenta que entre estas personas abundan los ojos azules y verdes, pelos rizados, color castaño y pelirrojo de pelo además de las narices aguileñas. Incluso hay personas como Cai Junnian, apodado por sus amigos y familiares como "Cai el romano", uno de los muchos aldeanos convencido de ser descendiente de la legión perdida.

Han aparecido igualmente restos humanos de mas de mil años de antiguedad con una altura media superior al 1,80 de altura, bastante altos para no ser europeos. Es interesante resaltar que aparecieron determinados elementos como monedas, cerámica y cascos de tipo romano aparte de existir constancia arqueológica de los restos de una fortaleza de alrededor de 30 metros de longitud y medio de alto. 




                                                    (algunos chinos-romanos y el mencionado muro)

Como conclusión, no se puede asegurar al 100% que estos hombres sean descendientes de los antiguos soldados romanos, especialmente porque al haber estado en plena ruta de la seda es probable que hubiera romanos que llegaban hasta este lugar con un fin comercial. Pero igualmente sería probable que esos comerciantes se hubieran establecido en la actual Zhelaizhai. Del mismo modo tampoco se puede descartar del todo, como algunos han hecho, que aquella legión romana no hubiera llegado hasta aquí, especialmente porque existen fuentes chinas que dan una serie de datos que mencionan una serie de características similares a las romanas.

En mi opinión la historiografia debe seguir investigando. Pienso que sobre lo que aconteció en la antiguedad apenas conocemos un pequeño porcentaje. Ni siquiera se puede asegurar enteramente que conozcamos bien la historia de Roma, pues nos ha llegado lo que nos ha llegado, pero muchos libros se perdieron, algunos conocidos y otros no, por ejemplo en los incendios de la Biblioteca de Alejandría.

Por ello considero que no es descabellado pensar en una legión romana que, tras haberse perdido, llegó hasta China. Uno podría plantearse ¿Por qué no intentaron llegar a Roma? la respuesta es un misterio, pero algo debió captar su atención en el lugar donde se asentaron.

lunes, 26 de marzo de 2012

El silencio de Mou

Mucho se ha hablado en estos días con respecto a las actuaciones arbitrales y sobre el silencio impuesto por Mourinho a su cuerpo técnico y jugadores.

No vi el partido del Villarreal, lo adelanto. Cómo muchos sabéis estoy haciendo un Máster y preferí escuchar el partido por la radio mientras estaba con mis trabajos. Pero durante la segunda parte una reflexión me venía a la mente acerca de la actitud de Mourinho en las dos temporadas que lleva entrenando al Madrid.

Cómo muchos recordareis, el entrenador luso vino al equipo merengue con un gran objetivo: vencer al Fútbol Club Barcelona, equipo que durante los últimos años ha instaurado su reinado en el fútbol mundial con un juego que la propia selección española ha hecho suyo (de hecho algunos de los mejores jugadores españoles son culés). Florentino Pérez le ha dado el poder total del club permitiéndole hacer un equipo a su medida.
Es cierto que el año pasado ganamos la Copa del Rey, pero también encajamos un humillante 5-0 en el Camp Nou, algo que no sucedía desde la temporada 94-95. En el resto de enfrentamientos Madrid-Barcelona no fuimos capaces de vencer, y eso que hubo unos cuantos. De acuerdo, en la vuelta de la eliminatoria de Copa disputada en la presente temporada estuvimos apunto de remontar el resultado global, lo cual nos hubiera permitido pasar de ronda. Pero la realidad es que no lo hicimos y, además, dicha eliminatoria se perdió en casa con un planteamiento cobarde por parte del entrenador. También es cierto que vamos lideres con una cierta solvencia, pero siempre recuerdo cuando Ramón Mendoza cesó a Radomir Antic, el cual iba líder pero con un juego bastante malo mientras que Mourinho cuenta con el total apoyo del presidente mientras la afición se aburre. Porque de acuerdo, tiene razón Mourinho cuando se queja de que el publico del Bernabeu no anima. Es verdad que al estadio va mucha gente simplemente a ver el fútbol mientras come pipas, pero también es cierto que si estás animando y el equipo no tira a puerta al final dejas de animar por aburrimiento (salvo que lleves encima unos litros de alcohol, todos sabemos que los Ultrassur antes del partido y en el descanso hacen botellón en Marcelino Santamaria).

Pero realmente la razón de escribir este artículo es la de que nunca me han gustado los entrenadores que pretenden ganarse la compasión de su afición quejandose de los árbitros. Es cierto que te pueden perjudicar si te expulsan a un jugador, si pitan un penalti inexistente, si anulan un gol legal. Pero también son ciertas dos cosas:

1) Si hay dos equipos en esta liga que no tienen derecho a quejarse de los árbitros esos son el Madrid y el Barça ¿Por qué? pues porque siempre salen beneficiados con respecto a los demás. Normalmente es mas fácil expulsar a un jugador de, por ejemplo, el Getafe o el Español, que de los dos grandes. Por otra parte muchas de las polémicas arbitrales son creadas por la propia prensa para captar la atención.

2) Cuando un jugador tuyo, por ejemplo Benzema, falla tres ocasiones de gol claras y otros jugadores también han tenido alguna ocasión clara que han fallado. O cuando en un partido apenas tiras a puerta ¿Cómo puedes quejarte del arbitro? ojo, esto no es una crítica a Benzema (quien, por cierto, el sábado se salió y fue ovacionado justamente) sino que en todo caso habría que achacar el empate contra el Málaga a la mala suerte, por ejemplo. El dia del Villarreal, de acuerdo, el arbitro fue un zoquete ¿Pero cuantas veces tiró el Madrid a puerta? ¿Cuantos goles marcó? por otra parte si un jugador (como Ozil) aplaude al arbitro está, según el reglamento, justamente expulsado. Cuando un macarra como Ruiz Faria (quien por cierto posa en fotos con el pecho al aire y musculoso en plan cani) es reincidente pues a la primera de cambio es expulsado, igual que ocurre con Mourinho. Lo de Cristiano Ronaldo al fin y al cabo fue producto de la impotencia pues además le había salido un partidazo.

En definitiva, no entiendo la tontería de hacer silencio ante los medios de comunicación, como tampoco el quejarse de los arbitros. Hay un versiculo del himno madridista (por cierto relegado al final del partido mientras que al principio ponen el soporifero himno de Plácido Domingo) que dice "cuando pierde da la mano". El Madrid está perdiendo sus valores de forma alarmante. Mis amigos de Santoyo son testigos de que, cuando ganó las primeras elecciones, vaticiné que iba a ser nefasto para el Madrid. El tiempo me está dando la razón. Se que nado un poco a contracorriente, pero espero y deseo que llegue el día en que ni Mourinho ni Florentino estén en el club. Creo que será un día grande para el madridismo, sinceramente.

martes, 6 de marzo de 2012

¿Por qué estudiar Historia?

Me ha ocurrido en diversos momentos de mi vida el haber tenido conversaciones con personas que me han cuestionado sobre mi afición sobre la Historia y el dedicarme plenamente a ella. Un maestro mio dijo en una ocasión que quienes vivimos la realidad actual tenemos una mentalidad post kantiana,  hoy se ha perdido (o se pretende que así sea, al menos) el valor de las materias conocidas como de letras. Por cierto, debo decir que a mi juicio la separación entre ciencias y letras es altamente errónea pues la Sabiduría es indivisible, Leonardo da Vinci era a la vez científico y humanista.

Considero que con la Historia se ha cometido un error en su enseñanza que ha conducido a ser una ciencia (si, una ciencia! habéis leído bien) minusvalorada. Durante el franquismo era usual en las escuelas enseñar la época de los Reyes Godos simplemente aprendiendo de memoria los nombres de estos además de las fechas clave. Es un error que ha venido repitiéndose hasta nuestros días (y aun dura). Pienso que, a la hora de enseñar Historia, no se debe fijar tanto la atención en las fechas (que son importantes, ojo) como en comprender el contexto global donde un hecho ha ocurrido. No sirve para nada conocer que en 1492 Cristóbal Colón descubre América si no comprendemos la sociedad que vivía en la península ibérica, no conocemos quien era Colón, que aspiraciones tenía, que repercusión tuvo su descubrimiento tanto para Europa como para América. Por eso considero que ha habido un grave error en la metodología disciplinar de una materia realmente interesante como es la Historia y que ha tenido una fama de aburrimiento injusta.
En el trabajo desempeñado por historiador hay mucho de filósofo por tanto, puesto que de lo que se trata es de comprender los hechos históricos, de saber interpretarlos para poder explicarlos. Cómo dice un amigo mio conocer el pasado sirve para interpretar el presente y predecir el futuro. Los historiadores no somos druidas que nos dedicamos a misteriosos arcanos sino que los hechos acaecidos nos sirven para comprender lo que ocurre en la actualidad y conocer el devenir histórico de una sociedad, salvo que se produzca un cambio de rumbo, claro. Un historiador debe arrojar luz sobre la Historia... Lux cum Historia.

Cómo algunos de mis lectores sabréis, me encuentro estudiando un Máster en Historia y Ciencias de la Antiguedad. Antes me licencié en Humanidades. Por otra parte soy creyente, concretamente cristiano-católico. Digo esto porque hoy he comprendido algo a lo que llevaba un tiempo dando vueltas. He de reconocer que en algún momento del presente curso me he desanimado un poco, me han venido ciertas dudas sobre el futuro en plan ¿para qué?. Hoy ha sido, cómo digo, cuando me he acercado a un grupo de historiadores católicos que hay en Geografía e Historia de la Complutense, he estado hablando con ellos y, concretamente, comiendo con uno que he conocido gracias a un buen amigo mio. En ese contexto creo que he conocido la respuesta a ese ¿para qué?. Resulta que en mayo del año pasado, tras unos ejercicios espirituales, fue cuando me decidí a especializarme en Historia Antigua y, por tanto, a ser fiel a una vocación que en el pasado había enterrado por querer ir por otros caminos, la de historiador. Sin embargo yo no lo acababa de ver claro. Bueno, a lo largo del último mes han sucedido una serie de situaciones concatenadas donde he ido conociendo a personas concretas muy parecidas a mi, algunos historiadores, otros periodistas (si me permitís la licencia, un historiador tiene algo de periodista y un periodista tiene algo de historiador). Sí, yo creo que no solo estoy estudiando Historia porque quiera investigar, sino para arrojar luz sobre aspectos que permanecen envueltos por la neblina de la sospecha en una parte de la sociedad... me refiero al cristianismo y a la Iglesia.

Como católico me veo llamado a dar a conocer la Iglesia histórica. Existe hoy en día toda una leyenda negra con aspectos tales como la Inquisición que se ha convertido en una permanente forma de acoso y derribo para con la Iglesia. También, debido a ciertas publicaciones pseudohistoricas, se ha levantado un velo de sospecha sobre el cristianismo desde sus orígenes que ha llevado a algunas personas a dudar de la historicidad de un Jesús mejor documentado históricamente que Julio César (mientras que los Evangelios mas antiguos conservados son del siglo II, me refiero al conocido como P52, el fragmento mas antiguo que se conserva de César es de la Edad Media). En mi opinión, no solo como creyente sino como historiador, poner en tela de juicio la veracidad histórica de Jesús de Nazaret supone un despropósito.
Siento, por tanto, una llamada, una interpelación a investigar el cristianismo primitivo y la propia historia eclesiástica con el objetivo de, mediante la divulgación, mostrar el verdadero Logos histórico a una sociedad que se ha construido un logos propio ignorando a ese Logos que es la verdad de todo lo creado. No estoy diciendo que se deba justificar todo lo que la Iglesia hizo en dos mil años (mas bien lo que hicieron personas concretas, debería decirse), a lo que me refiero es a que se debe conocer bien el contexto global antes de juzgar sobre un hecho concreto. No se puede, por cierto, juzgar lo que nuestros antepasados hicieron con nuestros actuales parámetros.

Por otra parte creo que la Historia es una ciencia que hoy en día se usa con objetivos ideológicos, nacionalistas y, en general, particulares con el objetivo de diferenciarse de los otros aun a costa de falsearla. Digo esto porque existen muchos mitos históricos que han generado nacionalismosOyarzun para fundar un puerto marítimo pero los lugares de verdadero interés eran los campos palentinos (no solo la actual provincia de Palencia sino todo el área vaccea, por el trigo), la costa mediterranea y la Bética (aceite, ect). Por cierto, hace poco estuve en San Millán de la Cogolla y las Glosas Emiliarenses estaban en castellano y euskera. No había ningún tipo de imposición, como comúnmente se dice, sino que el euskera convivió con el castellano desde la aparición de este (al igual que había ocurrido con el latín).

En definitiva, conocer la Historia, estudiarla, no es una labor realizada por un grupos de frikis con tiempo libre. Sirve para poder, analizando el pasado, comprender nuestro propio presente. Un ejemplo está en la actual crisis económica que estamos padeciendo... si hacemos una mirada retrospectiva a la situación vivida a partir del siglo IV podemos apreciar muchos paralelismos. Recuerdo una frase que una vez me impactó mucho: "solo hay una forma de destruir un gran imperio, que sea él mismo quien se autodestruye". Era de la película "La caída del Imperio Romano" y mientras el narrador decía esa frase se podía ver a los habitantes de Roma danzando en la calle, ignorantes de que habían entrado en la fase final del Imperio. Si lo pensamos detenidamente y realizamos una mirada a nuestra sociedad podemos ver elementos comunes. En la caída de Roma se dio una pérdida de los valores que habían caracterizado a la sociedad romana desde su origen. Y eso pese a que el cristianismo adoptó algunos de esos valores como suyos, algo que no sirvió para mantener al Imperio. Esto, creo yo, está sucediendo en nuestra sociedad. Se están perdiendo valores que están llevando a las personas a una creciente deshumanización que nos hará caer en una situación que podríamos catalogar como prehistórica. Al fin y al cabo Albert Einstein ya dijo que la IV Guerra Mundial se efectuaría a porrazo limpio. En definitiva, estamos cayendo en los mismos errores que cometieron los romanos, exactamente en los mismos y aun no nos hemos dado cuenta o, al menos, una gran parte de la población vive ajena a ello. Conocer el pasado sirve para no cometer los errores de aquel, un pueblo que desconoce su Historia está condenado a repetirla.

Yo quiero desarrollar una visión sobre los hechos del presente a la luz de la Historia. Creo que un blog es una buena plataforma. Al igual que, si Dios quiere, algún día espero poder investigar de cara a publicar libros divulgativos sobre el pasado. Termino este artículo haciendo una defensa del latín, lengua que ha caído en desuso incluso en la Iglesia (pese a que sigue siendo lengua oficial eclesiástica y los documentos papales son primero escritos en latín). Viene a colación de que en muchas ocasiones hay quien se pregunta sobre si tiene algún interés estudiar una lengua muerta. Qué se lo pregunten a los habitantes de Cabra, si no fuera por el latín en vez de egabrenses les llamarían cabrones.